Publicado por “Harvard Medical School: Trusted Advice for a Healthier Life”
Traducido por:
Dra. María Esther Zurita Jiménez
Si bien la forma más sencilla de controlar la presión es tomando las pastillas que te recetan tús médicos, estos medicamentos pueden ser costosos y algunas veces tener efectos secundarios. Sin embargo relajar cuerpo y mente por algunos minutos al día puede disminuir hasta 10 puntos o más tu presión arterial y ayudarte a mantenerte sano.
Investigadores del Instituto Benson-Henry para la Medicina de Cuerpo y Mente del Hospital General de Massachussetts (afiliado a la Universidad de Harvard) compararon a un grupo de personas que realizaron una técnica de manejo del estrés llamada “Relaxation Response”contra otro grupo de personas a quienes dieron educación con respecto a cambios en el estilo de vida como: la reducción de sal en la dieta, pérdida de peso y ejercicio.
Lo que encontraron fue lo siguiente: La presión arterial disminuyó más en el grupo que aplicó la técnica de manejo del estrés 32% de los voluntarios en el grupo de relajación pudieron eliminar alguno de sus medicamentos para disminuir la presión y mantenerse controlados comparado con 14% de las personas en el grupo de los cambios de estilo de vida. La técnica “relaxation response”, desarrollada por el Dr. Herbert Benson de la Universidad de Harvard, ha demostrado ser capaz de reducir la frecuencia cardiaca, la tensión arterial , frecuencia respiratoria y tensión muscular. A continuación te presentamos la técnica:
Siéntate cómodamente, en silencio y cierra los ojos.
Selecciona una palabra (como “unidad” o “paz”), una frase o una oración corta en la que te puedas concentrar.
Relaja tus músculos progresivamente desde los pies hasta las pantorrillas, muslos, abdomen y hasta llegar al cuello y la cara.
Respira lentamente a través de tu nariz y exhala a través de la boca mientras repites en silencio tu palabra, frase u oración.
Realiza esto durante 10 a 20 minutos.
Siéntate en silencio por un minuto y abre tus ojos.
Practica esta técnica una o dos veces al día.
Es importante que todos los pacientes mantengan su presión arterial monitorizada frecuentemente, realicen los cambios en el estilo de vida necesarios para evitar otras enfermedades y no modificar ningún medicamento sin la indicación de tu médico.
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